Una mascarilla facial fácil de usar. Las arcillas y la espirulina se combinan con manteca de karité. Este tratamiento cremoso ilumina la tez, afina los poros, reaviva la piel y su textura, preservando su hidratación. Ya no es necesario elegir entre luminosidad y confort: este tratamiento purificante también es imprescindible para las pieles reactivas. 75g
BENEFICIOS
- PURIFICACIÓN PROFUNDA
- HIDRATACIÓN Y BRILLO
- TEZ CLARA Y EQUILIBRADA
LUCHAR
- PIEL HASTA EL FINAL
- ENROJECIMIENTO
- IRRITACIÓN
- SIGNOS DE FATIGA
- TEZ APAGADA
EL 89% VE UNA MEJORA VISIBLE EN LA LUMINOSIDAD DE LA PIEL DESPUÉS DE 28 DÍAS¹
EL 81% ENCONTRÓ QUE SU PIEL HABÍA GANADO VITALIDAD DESPUÉS DE 28 DÍAS¹
Activo
Usar Aplicar dos veces por semana sobre el rostro limpio. Dejar reposar. No esperes a que la mascarilla se seque para enjuagarla, eso no sucederá. Su textura suave y cremosa permanecerá sedosa durante toda la aplicación. Retirar después de 10 minutos y aplicar una crema hidratante. Ingredientes
Agua/agua/agua, caolín, glicerina, bentonita, estearato de glicerilo, aceite de semilla de Helianthus annuus (girasol), ácido esteárico, propanodiol, extracto de Arthrospira Platensis (espirulina), extracto de raíz de Withania somnifera*, jugo de hoja de aloe barbadensis*, flor de caléndula officinalis. Extracto*, extracto de flor de Chamomilla Recutita (Matricaria)*, manteca de Butyrospermum Parkii (karité), complejo de clorofilina-cobre, fructosa, caprililglicol, pentilenglicol, etilhexilglicerina, ácido cítrico, sorbato de potasio, benzoato de sodio, perfume/fragancia**, cromo. Verdes Óxido/CI 77288. *Ingredientes procedentes de agricultura ecológica **Fragancia natural Una palabra de 27 Rosiers Nuestros estilos de vida han cambiado. Entre los viajes, las estaciones, la contaminación ambiental y digital, la vida cotidiana satura nuestra piel y a nosotros con ella.
Cuando la piel ya no responde a nuestra rutina diaria como antes, o cuando los productos que antes utilizamos a diario parecen estancarse en cuanto a eficacia, debemos ver los signos de que la piel ha alcanzado la saturación. La piel aparece apagada y cansada, sensible, aparecen imperfecciones.
Las toxinas presentes se acumulan. Estas reacciones normales se pueden calmar con nuestro suave tratamiento purificante destinado a reequilibrar el equilibrio de la piel.